Por Rivkah Subero
Ser Judío
significa ir mas allá de lo que se ve, de lo superficial, ser judío es vivir
consciente cada segundo de la vida entendiendo que es un deber agradar a Aquel
por cuya bondad existimos a través del cumplimiento de la sagrada Torah.
Es tratar de emular la naturaleza de nuestro Creador
trayendo luz en medio de tanta oscuridad, es el recordatorio de una alianza
milenaria en el Sinaí que nos compromete a la fidelidad y a la responsabilidad
de la extensión de la voluntad expresada de Hashem, a nuestros hijos, nietos,
bisnietos…
Ser judío
es aceptar las consecuencias de tus actos sean buenos o no. Es entender que
todo el universo y todo cuanto sucede es controlado por un solo ser…
Ser judío
es agradecer en todo momento, aún cuando lágrimas de dolor corren por nuestras
mejillas.
Ser judío
no es ser perfecto, el judío se equivoca pero aprende de ello y se establece
patrones para hacerlo mejor…
Tal como
versa un famoso pensamiento, “ser judío es vivir recordando”, recordando el
pasado de una gloriosa nación y recordando las dádivas de nuestro Creador…
Es
caminar en una dirección distinta al mundo circundante…
Ser judío
es ver siempre la luz al final del túnel y encaminarse hacia una vida cuyo
significado se fomente por medio de actos de bien a la humanidad…
Ser judío
es aprender y reaprender cada día tal como lo enseñaron nuestros padres…
Y para
finalizar, ser judío es entender y siempre recordar a nuestros antepasados
Abraham, Itzjak, Yaakov, Moshé, David y todos nuestros sabios porque en sus
vidas está la clave para dar los pasos correctos…
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